abril 28, 2014

Huitrinalhue

 Entre sus dedos mezcló la masa primigenia que había cocido para crear al espectro. En aquella sala escavada en roca dentro de la cueva de los kalkus, la bruja había reunido huesos y muertos, piel y uñas, además de preparar una masa asquerosa con otras partes que es mejor no saber.

Colocó cada elemento en el suelo siguiendo el patrón preciso del cuerpo de un hombre. Hizo el esqueleto con los huesos, en las manos sin carne puso uñas, juntó las articulaciones con aquella masa, y luego cubrió su arreglo con la piel robada. Entonces, hizo billar su chaleco makuñ para que de él surgiera el espíritu, el alhue que robó, torturó y corrompió para este propósito.

 - Ahora serpas tú quien obedezcas, padre.

 El negro alhue flotó sobre los elementos, se unió a ellos y misteriosamente el arreglo empezó a cobrar vida. Se retorcía, convulsionaba, gritaba en silencio.

 - Levántate – le dijo la bruja.

 El espectro se levantó, con ojos vacíos e invisibles. Era un ser semi-etéreo, más una sombra que un ser, pero un ser que podía ahorcarte, cortarte y beber tu sangre, sin que te dieras cuenta de su presencia. Le colgaban jirones de piel, y las largas y afiladas garras se tensaban y relajaban a medida que el ser terminaba de tomar forma definitiva.

- Muy bien, ahora eres mi Huitrinalhue. Eres mi esclavo. Entonces, ¿quieres saber a quién vas a matar?

 El Huitrinalhue gritó con alegría y ansias de sangre.

2 comentarios:

  1. hay que buen cuento de leyenda mapuche, me lo imagine todo

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    1. gracias ^^
      el cuento es un spin-off de otro que ahora esta en un concurso, asi que no puede estar publicado en el blog xD
      aqui esta por si quieres leerlo :)
      https://www.dropbox.com/s/0s1danpojbfz1by/Iniciaci%C3%B3n%20Oscura_Concurso.docx

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