- Tú, ¿qué haces en mi interior? ¿Quién te da el derecho de
manejar mi mente? Yo lo sé, me lo contaron, que alguien tejió la realidad y te
cosió en mis sueños. Ahora provocas pulsiones, generas miedos, incitas errores.
¡Vete! ¡Vete de mí! Yo soy mi propio espacio y tiempo. Alguien te creó, y me
intenta controlar desde lejos…
- ¡Vete, y nunca regreses!
- El inconsciente es el
lenguaje.
- ¡Vete, y nunca regreses!
- El lenguaje es la
cultura.
- ¡Vete, y nunca regreses!
- La cultura media tu
cuerpo.
-¡Vete, y nunca regreses! Yo pienso y actúo en el mundo, por
mí mismo y mis hermanos. ¡Yo y nosotros
contamos nuestra propia historia!
¡¡VETE, Y
NUNCA REGRESES!!
…
La figura se debatió en la oscuridad buscando algo que se
había ido. Por fin, convencido, levantó sus brazos y exclamó:
-¡SMÉAGOL ES
LIBRE!
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