marzo 29, 2012

Duende


 Barba arremolinada, secreta mirada desde los papeles escondidos. El pequeño ocultaba su alma del habitante de la casa, le teme y por eso duerme de noche, y aprovecha la soledad del lugar para hacer sus diabluras. Ya no hay nadie, corre por el delgado aire y roba una galleta, bebe algo de la cerveza que quedó del otro día, y enciende el televisor, se deja llevar por las imágenes superficiales.
 No se sabe de dónde vino, de un bosque lejano, de otro planeta, o de otra dimensión. La criatura solo toma lo que necesita, y su barba crece. Dentro de su casa de metal forjado, bajo una ruda, atisba el horizonte lejano este. Oye el ruido de unas llaves tintinear. Corre presuroso al final de la tarde, cuando ya casi todo es azul nocturno, y ya no vuelve a salir. Sólo se ven sus ojos entre las rendijas de su hogar, con un brillo secreto.

marzo 20, 2012

La Raíz de todo Mal

Ojos vacíos, turbias aguas, oscuros frutos. Techo de hojas, pilares de madera, suelo de tierra. El bosque lluvioso vibra con mi presencia. Sabe del brujo que ha entrado a develar sus secretos. Conozco el veneno de cada flor, los nutrientes de cada fruto. Capturo los ngen del aire, del viento etéreo, de la tierra dura y la roca viva. Las raíces se acercan para alimentarse de mí, porque soy yo la Raíz de todo Mal, y planto la semilla del caos allí donde vaya. Terminados los rituales, muevo mi chaleco de piel humana y vuelvo a la civilización, y sus ruidos contaminados de presunción.
 De los venenos implantados en la gente obtengo mis ganancias. De haber sabido que los hombres son tan ambiciosos, tal vez no hubiera nacido. Si hubiese tenido en mente que la maldad se cuela tan fácil en los delirios de venganza, no hubiera sido el mejor sicario. Asesino en la lejanía, mientras mi semilla destruye tu vida a través de las venas sangrientas, torciendo tu cordura. Es demasiado tarde para mí, ahora nada me da más alegría que tus gritos rebosantes de pánico, suplicantes…
 El aire cargado de violencia se arremolina entre mis ropas, enloquece mis sentidos. Hay que trabajar y ganarse el pan. ¿Iré por el camino correcto, o estaré demasiado drogado?

marzo 03, 2012

Ojos del más allá


 Ojos que me miran del más allá, vigilan mis pasos desde el umbral de cada puerta, esperando el momento en que los convoque al viento aciago que es mi llamado. Entre cada recuerdo extinto de este mundo, paso al otro en busca de las respuestas y venderlas a las almas perdidas. Soy el maestro de las artes oscuras, un mago capaz de alcanzar los corazones nocturnos de tus deseos.
 Camino entre las sombras como otro mortal, por callejones que ni las ratas intentan andar. El viento y las sombras se arremolinan mientras el tiempo se detiene, mi pelo vuela con la briza envenenada. Un huracán de pestilencia se desata cuando ambos tejidos se separan para abrir el túnel hacia la perdición. Abro la puerta, ¡la sangre brota de las criaturas guardianas del tiempo y el espacio! atravieso el mundo; nazco en el lugar prohibido. ¡Soy el brujo de la tempestad maldita, creador de mentiras e ilusiones! Él y sus espíritus condenados esperan mi llegada en la última estación del país desolado.
 Pero mierda, mi sombrero se quedó en el otro lado.

*imagen original de The Sandman, por Neil Gaiman.